Los móviles modulares en este último tiempo están generando ilusiones y expectativas. Ahora incluso no es solo esto, sino que además se está incursionando en trasformar los productos de mercado hasta su máxima expresión. Los encargados de Paddle quieren llevar la delantera de estos "alocados" cambios creando un Smartphone que muta morfológicamente. Así es, este móvil que cambia de forma es un celular desplegable.
Este tipo de teléfono es una creación desarrollada por investigadores de la universidad Belga Hasselt. El diseño de este dispositivo emula en algún aspecto al cubo de Rubik, el cubo típico que se trata de acomodar colores en sus lados. Este móvil tiene 8 módulos que se pueden doblar y desplegar para cambiar de forma al antojo del usuario.
Este Smartphone puede formar una pulsera, un adorno o casi lo que uno quiera. Raf Ramakers, una de las caras de este proyecto, dice que cuando Paddle se despliega entero es del tamaño de un iPad pero si se lo dobla sería más chico que un iPhone.
La idea de este dispositivo proyecta examinar un nuevo tipo de terminales que combinen la plasticidad de las pantallas táctiles con las ventajas que puede ofrecer manejar objetos con distintas figuras.
El asunto es que este diseño actualmente hace uso de 2 unidades externas. Uno de estos aparatos es un sistema de seguimiento óptico y un proyector:
El seguimiento óptico es un sistema que se encarda de calcular la ubicación de los marcadores en 3D, para esto combina imágenes de 8 cámaras infrarrojas de la cual esta compuesto. De esta forma registra además posiciones de los dedos para permitir el manejo táctil en su interacción.
En cambio, el proyector representa la información en el dispositivo y la deforma de acuerdo al movimiento dactilar del usuario que lo maneja. La ida de los responsables es que en un año, o un poquito más, tengan un prototipo que sustituya este sistema con pantallas OLED o de tinta electrónica.
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